Inicialmente se implantaron los grupos filtrantes incorporados en los muebles de cocina, que después fueron evolucionando y diversificando sobre otras muchas opciones en función de los requerimientos de cada situación, dando lugar a una amplia oferta de equipos de extracción, de muy diversas características, y que trataremos de resumir.

Si bien en un primer momento se puede pensar que un grupo filtrante es eso, es decir, tan solo un motor al que se le aplicaban unos filtros, más o menos evolucionados, (metálicos, de carbono, etc…) y que se limitaban a “limpiar” el aire, proveniente de la cocción diaria, fundamentalmente, sin una salida de humos hacia el exterior, con el tiempo se han impuesto en nuestro país las campanas, que sí tienen salida de humos hacia el exterior.

Aquí es muy importante nuestra cultura culinaria, en la cual se practican comidas muy elaboradas, fritos, etc., para lo cual se necesita una mayor respuesta a la hora de la evacuación de estos humos.

El grupo filtrante funciona limpiando el aire del ambiente y eliminando los malos olores sin necesidad de expulsar este aire al exterior. Dispone de un sistema de filtros por los que pasa el aire y este es expulsado de nuevo a la cocina pero ya limpio

La diferencia básica, con una campana extractora es que esta, sí tiene salida de evacuación de los humos, por lo que, como norma general, el motor tiene menos potencia, y con ello, menos ruido, factor este a tener en cuenta. Y sus filtros suelen ser metálicos y de fácil limpieza.

Tipos de campanas extractoras:

Se podrían clasificar inicialmente en tres grupos:

1. Campanas convencionales.

2. Campanas decorativas.

3. Campana integradas.

1. Las campanas convencionales son aquellas, situadas bajo los muebles de cocina, encastradas, quedando a la vista los mandos y los filtros. Son las de toda la vida.

En cuanto a las extraíbles, que sería la variante a las convencionales, aunque están instaladas dentro del mueble, es inevitable que la campana termine por verse en su frontis y en su bandeja extraíble con el filtro correspondiente.

En relación al mobiliario de cocina, si lo que queremos es darle cierto protagonismo a la campana, normalmente para cocinas grandes, las decorativas en sus diversos modelos serán las adecuadas.

2. Las campanas decorativas requieren de más espacios libres, por lo que una integrada en los muebles, siempre podrá optimizar mucho mejor los espacios disponibles alrededor de su instalación e incluso en el interior del propio mueble.

3. Si por el contrario buscamos que esta pase desapercibida, entonces debemos ver alguna del tipo integradas.

Potencia de evacuación de la campana:

Siendo la función principal de la campana extractora la de extraer humo, debemos tener en cuenta cuál es la capacidad de extracción que vamos a necesitar. Si nos quedamos cortos calculando, es posible que el extractor no tenga la potencia necesaria y, a pesar de estar puesto, no podamos extraer todo el humo generado. 

Por ello, para conseguir el máximo rendimiento de la campana, esta debe realizar unos 10 cambios de aire por hora. Sin superar el umbral de confort auditivo, cerca de los 55 decibelios. 

¿Cómo calcular la potencia que necesita una campana extractora? 

La formula es bien sencilla pero hay que saber cómo calcularla.

m² x altura x 10 = m³/h

Primero debes conocer los metros cuadrados de la cocina, estos se calculan ancho x profundo. Pongamos por ejemplo, una cocina de 4 metros de ancho multiplicados por 3 metros de profundo, son 12m².

Mide la altura de la cocina, por ejemplo 2,5 metros. A los 12m², multiplica la altura de suelo a techo de la cocina en este caso 2,5 metros.

Al resultado de los m² por la altura, multiplica por 10 o por 12, que serían los cambios de aire que debe realizar la campana en 1 hora.

El resultado total te da la potencia óptima que debe tener la campana en tu cocina.

Ejemplo por 10: 12m² x 2.5m x 10 = 300m³/h

Ejemplo por 12: 12m² x 2.5m x 12 = 360m³/h

Como norma general, debemos estimar la necesidad real de extracción, que se obtiene multiplicando los metros cuadrados de suelo de la cocina por la altura de la misma.

Como regla general y meramente orientativa, esta cifra, nos debe indicar el volumen de aire de la cocina, expresado en m3, que puede ser regenerado por la campana, siendo desde 6 (velocidad lenta) a 12 veces (velocidad más rápida) en una hora.

Para sacarle más partido:

• Al usar su campana, recuerde que mayor velocidad es sinónimo de más ruido.

• Puede utilizar la velocidad más suave para poner en marcha la campana momentos antes de empezar la cocción (así el aire empezará a converger hacia el filtro). También puede dejarla funcionando un poco después.

• Es importante limpiar los filtros periódicamente siguiendo las indicaciones del fabricante.

• Evite usar productos abrasivos para limpiar la superficie de la campana. Un paño con agua jabonosa dejará impecables las superficies lacadas. Las de acero deben secarse en la dirección del pulido.

¿Cómo elegir la campana extractora más adecuada?

No existe un factor determinante a la hora de elegir una campana u otra, sino consejos prácticos, en función de las características de la cocina, si bien hay factores que aconsejan sobre uno u otro tipo.

Elegir una campana extractora silenciosa y potente que evite los olores desagradables y que recoja la grasa sin hacer prácticamente ruido, con un mantenimiento fácil, va a marcar la diferencia de nuestra cocina

Un factor importante a la hora de elegir una campana va a ser la estética.

Según el diseño de nuestra cocina tendremos que optar entre elegir una campana decorativa , para cocinas grandes,(campana de isla o de pared) o campana convencional ó integrada en el mobiliario.

 La campana tiene que ayudar a mantener la armonía estética que existe en la cocina.